Guardo-TAMARIA 'Senderos reguapos'

Desde el pueblo de Guardo tomamos la carretera en dirección N. para superada la ermita de San Cristóbal ( km-0,5) desviarnos por un sendero estrecho y con mucha vegetación que directamente nos introduce en el bosque de robles. Aquí comienza un rompe piernas a través de "senderos de Leyenda" como el de " Los Lobos". Parada imprescindible para tomar un tragito de agua en la "Fuente de la Salud". Muchos senderos y pistas disfrutonas hasta llegar a dar vista al pueblo de Velilla del Río Carrión. En el descenso tuvimos alguna duda de por donde descender al perderse un poco las trazas de los senderos pero se puede bajar sin demasiados problemas echando pie a tierra puntualmente donde nos tropezamos con algún peldaño rocoso. Desembarcamos en una fuente y surgencia (Fuente de la Reana) de la edad románica. Allí nos encontramos también una preciosa ermita de la época. Los jardines nos invitan a reponer fuerzas y agua. Seguimos en dirección N. para pasar al lado de un parque infantil con unos robles históricos por su tamaño. Buscamos cruzar el Río Grande y tomar las pistas asfaltadas y rodeados de un bosque de sabinas de las minas abandonadas de Antracitas de Valdehaya. Superadas estas instalaciones ruinosas , nos adentramos en un precioso hayedo con algunas rampas difíciles pero con curvas perfectamente trazadas para disfrute del BTT. Iniciamos un continuo sube y baja muy disfrutón por sendas estrechas que nos darán mucho " flow" y diversión. Todo ello hasta finalizar en otras instalaciones ruinosas de la minería y tomar el Camino de Corcos.
Una auténtica maravilla para disfrutar del BTT en una zona que volveremos una y mil veces. Gracias a todos los que hacen posible que se conserven esas sendas históricas!
Aviso: Las ruta aquí descrita, así como el track para GPS, es meramente orientativo. Queda bajo la responsabilidad de quien la realice, las medidas de seguridad propias de cada itinerario. Toda la información aquí disponible es informativa, eximiéndose el autor de responsabilidad alguna ante cualquier percance que pudiera sufrir quien por voluntad propia o inducida realice la ruta.